jueves, 29 de mayo de 2014

ENTREVISTA DE ELGA REATEGUI A ROSARIO VALCÁRCEL

Rosario Valcárcel: “Yo creo que el sexo puede salvarnos del mundo”

Su reino es el sueño perpetuo y camina sobre las aguas de la sensualidad. Está hecha de arena y sentimiento, y se alimenta de sol. Es poeta y como tal, puede ser turista en otras dimensiones y charlar de tú a tú con habitantes mágicos, pero como narradora también  es capaz  de meterse en la piel de comunes mortales y adentrarse en los terrenos de sus insatisfacciones, dolores y ansias. 
Eso y más es Rosario Valcárcel, una autora que es considerada la pionera de la narrativa erótica canaria. Los invito a conocerla.

 ¿De qué manera influye el lugar donde ha nacido o su hábitat en la personalidad u obra de un escritor o creador?  Usted que lo ha hecho en una isla,  y obviamente, cerca al mar, ¿cómo se ve a sí misma y de qué forma interpreta su obra?  ¿Qué le debe a ese entorno?

En mi obra siempre aparece de alguna manera  el mar, aparece el amor y el miedo que siento hacia él. Las imágenes tanto visuales como auditivas de mi playa de Las Canteras, su arena blanca, el nombre de sus piedras, la fauna marina. Las islas. Las calles en donde jugaba de pequeña, el cine, el entorno en donde  crecí y me enamoré. Todo ello ha ocupado un lugar especial al que le debo alegrías, logros, emociones, nostalgias…

Su primera obra “La peña de la Vieja y otros relatos”, como era de esperarse, tenía que ver con el
 mar, pero con aquel de sus recuerdos,  ¿obviamente existe un antes y un después en la visión que se tiene de algo cuando somos niños y luego adultos?  ¿Quién cambia en  verdad,  el mar o el espectador,  ninguno o ambos?
Concretamente en mi primer libro “La Peña de la Vieja y otros relatos” es un homenaje a la playa de Las Canteras, al cine de siempre, la Navidad, el Carnaval, a una ciudad más humana. A mi infancia entre Gran Canaria, Tenerife, La Palma. Un libro escrito sobre los recuerdos.
Un libro que escribí en los años en que viví en Madrid. Momentos en que se creó en mí una necesidad de evocar y transmitir. De escribir sin nostalgias o acaso sí.
La visión que tenía del mar no ha cambiado, sigue siendo aquel espacio sobrenatural, mágico en donde pasé mi infancia. Lo que ha cambiado es la conciencia del mismo y eso es lo maravilloso. 

¿Qué la lleva a escribir? ¿Qué recuerdos tiene de esos primeros instantes con la literatura?  ¿Qué temas la inspiraban? ¿Alguien la alentó en su vocación?

Todos los isleños y especialmente los creadores nos identificamos con el mar porque él nos transmite imágenes, nos cuenta cosas, ideas… Nos inspira.
Pero además yo tuve la suerte de entrar en la literatura y en el cine de la mano de mi padre. Un ser que inventaba historias, que contaba cuentos y que llenó mi universo de murmullos y sueños, de animales que hablaban. De cuentos que él se inventaba.
También me inspira la realidad, la propia vida, el amor las fotografías y sobre todo el cine de antes, ese cine clásico de mi adolescencia en donde todo se imaginaba, se soñaba. Sueños que siguen siendo necesarios para escribir.   

Empezó con los relatos, pero también hizo poesía, ¿por qué el cambio? ¿Qué necesidades no podía cumplir la narrativa?

No creo que haya sido un cambio brusco porque dicen que mi narrativa es poética. Aunque en realidad escribir poesía es algo más hondo, más profundo, más meditado, más potente, más silencioso.  El camino hacia la raíz. Con la poesía la palabra a veces tiembla y sufre, otras  acaricia y goza.
Para mí escribir poesía ha sido un reto heroico.
¿De qué manera colmó sus ansias comunicativas el poemario “Las máscaras de Afrodita?  A propósito, ¿no nos sacamos la máscaras ni para dormir? ¿Es que nunca nos mostramos tal y como somos? 
Aunque ya había participado en antologías con algún poema. El poemario Las Máscaras de Afrodita colmó mis ansias de levedad y de autenticidad interior.
En el mundo actual todos somos productos de nuestra cultura, de una etiqueta. En cierta medida  nos disfrazamos, utilizamos una máscara quizás para defendernos de nuestros miedos o para cumplir un rol ante la sociedad. 
Pero para los artistas eso es una ficción porque nuestra escritura no puede, o no sabe mentir. No podemos ocultarnos detrás de máscaras. Necesitamos contar nuestros secretos, nuestras emociones…

¿Se siente mejor en su rol de poeta?  ¿Qué ventajas otorga ser un narrador y a qué no puede aspirar un poeta dentro de la literatura?

En mi rol de poeta puedo crear seres metafóricos, puedo ser más auténtica. Como narradora puedo contar, hacer ficción o narrar la realidad sobre la rutina y la languidez que se produce en la vida cotidiana de las parejas, sobre el poder de la fantasía y el sexo. Me permite fabular, explayarme en el tema que surja. Me permite adoptar figuras e imágenes diferentes a la vez.

Pero los temas del amor y el erotismo no aparecen por vez primera en su poemario, sino ya antes, en su libro “Del amor y las pasiones”, y en “El Séptimo Cielo” sin embargo, muchos críticos coinciden en afirmar que es con “Las Máscaras de Afrodita” donde se encumbra su talento en el ámbito amoroso-sensual-erótico.

Mi literatura ha tenido desde sus comienzos  una carga sensual, de fantasía, el placer y el sufrimiento, la conciencia de lo efímero de la vida.  Me alegra saber que con “Las Máscaras de Afrodita” ha sido mi momento más amoroso-sensual-erótico.
Ahora bien al estar escrita por una mujer puede aportar elegancia, dulzura, sensualidad, intimidad o ternura… Quizás las mujeres podemos aportar una presencia diferente de nosotras mismas, esa imagen moderna de mujer que se impone como ser que reivindica su sexualidad y no como objeto deseado.

Muchos expresan que con el erotismo hay que ir con mucha sutileza, o mejor dicho, con mucho tacto y esas precauciones se extreman cuando se trata de abordarlo en la literatura. Supongo que a las mujeres se les pide más, o quizá, se espera menos de ellas. Como fuere, ¿cómo se llega a ser considerada la pionera de la literatura erótica canaria hecha por mujeres? ¿En qué momento aparece mostrando su propuesta y por qué impacta tanto?  Y, algo más, hasta ese instante ¿qué habían o no hecho sus colegas hombres por la literatura erótica canaria?

En Canarias ha habido un vacío. Las sociedades patriarcales frenaron y negaron el disfrute de la mujer. El placer ha estado marcado por la religión, la culpabilidad y los tabúes. El deseo y el gozo eran entendidos como sombras pecaminosas, vivíamos entre el cielo y el infierno. Existía una incapacidad para hablar del sexo mismo, de alguna forma se sublimaba. Y por lo tanto no ha sido un tema que se haya prodigado en los tiempos pretéritos.
Hoy el erotismo está de moda en todos sus registros escritos. Como mujer, estoy considerada la pionera de la narrativa erótica en Canarias.

¿Ha cambiado en algo la actitud que tienen los lectores frente a la literatura erótica? ¿Siguen siendo ellos los que más buscan lecturas de este estilo? Y las mujeres, ¿qué esperan de este tipo de libros?

Para la sociedad actual todo es erotismo, se emplea en la publicidad, en la política, en el cine. Estamos saturados de seducción erótica. Y creo que la mujer es la que más busca este tipo de literatura, quizás porque durante mucho tiempo estuvimos vetadas.  Este tipo de libro puede enseñar a los hombres y a las mujeres a querernos más, a ser más libres.  

Cuando se habla de literatura erótica sana ¿entra a tallar la autocensura, los prejuicios, la culpa o la desinformación?  ¿Nos hacemos un lío con los conceptos? ¿La mayoría entiende más o menos lo mismo? El escritor reúne en su escritura el recuerdo de unas experiencias reales.

La sexualidad femenina es un descubrimiento de los años sesenta, gracias a ese momento la mujer se hizo visible, se despoja de sus prejuicios y expresa sus sentimientos más profundos. El escritor/a de alguna forma cuenta sus experiencias y sus sueños. Hoy la mujer explora y descubre su cuerpo, realiza juegos eróticos, se encuentra libre de la culpa, del pecado. Y creo que hoy, nadie se hace un lío con los conceptos.

Mi literatura erótica habla del amor, de los cuerpos encontrados, de acontecimientos, del placer del juego, la ironía, la narración libre y desenfadada, de experiencias personalizadas y de  las relaciones humanas que sufren  metamorfosis. Del sexo como salvación que sale al encuentro de la pequeña muerte y la convierte en aliada de la vida.

¿Qué tipo de literatura erótica es la suya si queremos ubicarla en un contexto determinado?  ¿Cómo definiría su trabajo en este aspecto?

Mi trabajo lo definiría como un canto a la libertad, a la vida, a la belleza. Decía Dostoievsky que “Solo la belleza salvará al mundo”. Yo creo que “el sexo puede salvarnos del mundo”. Es un antídoto ante las desgracias, ante la muerte

Pero su preocupación o interés literario también se extiende hacia el lado de la niñez. Vemos que ha hecho poesía infantil, participado en coloquios realizados en escuelas y  forma parte del colectivo Andersen, ¿no cree que es nuestra obligación devolverle a los niños su edad, su estado natural? En otras palabras, dejar que vivan su tiempo sin apuro y no permitir que envejezcan prematuramente con cosas de adultos.

Totalmente de acuerdo yo siempre digo que yo, afortunadamente, he vuelto a ese mundo de la infancia, de dónde nunca tenía que haber salido. Al mundo que más se acerca a la perfección y del cual siempre estamos aprendiendo. Por eso soy partidaria de que los niños vivan su infancia sin prisas y que la vivan intensamente porque ella será la energía que le servirá para su vida de adulto.

Dio el salto a la novela en 2012 con su obra “Moby Dick en Las Canteras Beach”, que recrea  el
rodaje de la película “Moby Dick” en aguas canarias. ¿Qué tiene de usted, María Teresa, la adolescente narradora de esta historia?  Sin duda hay acontecimientos que nos marcan de por vida, pero con el correr del tiempo, los evocamos algo distorsionados. Sobre todo eso pasa con los que nos hicieron felices, sin embargo, los recordamos mejor de lo que en verdad, fueron, ¿no cree? 

Di el salto a la novela con Moby Dick y para ello me sumergí en el mundo de los platós, del rodaje de Moby Dick, protagonizado por Gregory Peck y dirigido por John Huston en las aguas de mi playa de Las Canteras.
 María Teresa, la narradora de mi “Moby Dick en Las Canteras Beach”, tiene de mí la memoria inconsciente asociada a las cosas que mi familia, amigos y vecinos contaban sobre el rodaje que tuvo lugar en Gran Canaria.
Recuerdos que se relatan en la novela, que no se han distorsionado porque antes de empezar a escribir me documenté con los periódicos de la época. Además tuve la suerte de tener las voces de algunos de los protagonistas canarios, que intervinieron en el rodaje, en un CD titulada “Salvar la Memoria Moby Dick y Tirma” que realizó en la isla Luis Roca Arencibia.

¿Qué espera de su futuro literario?

Espero del presente. No quiero afrontar el futuro sino vivir el presente y en él poder seguir trabajando, leyendo y mucho, tanto para mi proceso de escritora como para mi vida espiritual, porque estoy convencida que a través de la lectura puedo enriquecer mi vida, incluso llegar a ser mejor persona.


Foto de Elga Reategui y portada de libros.
elgareategui.blogspot.es

martes, 27 de mayo de 2014

ROSALUNA Y LA VELETA MAGICA, Melu Vallejo

                    No sé por qué me dedico a esto…Me refiero a escribir, y en especial a la escritura como medio para narrar historias, relatos imaginarios que nunca han sucedido en eso que denominamos mundo real. Discurso sobre la inutilidad de las artes, Paul Auster

Cuando era pequeña me cautivaba la lectura de los libros de Charles Perrault y de Grimm, aquel caudal de sensaciones y de vivencias capaces de trasladarnos a ese maravilloso mundo de los cuentos, de dioses que construían el Universo entre palacios de colores iluminados o de mundos encantados en donde vivían las hadas. Me cautivaba ir descubriendo el lenguaje simbólico que escondían las portadas de colores de los libros, los dibujos fantasiosos que ilustraban el interior. Pero lo más apasionante era que sabías que podía ocurrir cualquier cosa, que los personajes  te iban a llevar  por caminos insospechados, mágicos.

Y eso es lo que he vuelto a vivir con el nuevo cuento de Melu Vallejo: Rosaluna y la veleta mágica. Sí, porque es un cuento que comienza más allá del cielo, que comienza en el firmamento donde viven las estrellas.

 Hace mucho, muchísimo tiempo, cuando los dioses empezaban a construir el universo, en unos de sus palacios nació una niña a la que llamaron Luna. Se parecía a una de esas hadas buenas y, además, se convirtió en una gran chica. Muchos jóvenes dioses la pretendía, pero ella los rechazaba. Sabía que si llegaba su verdadero amor, lo reconocería al instante.

Un cuento estructurado en tres partes. Un cuento que narra hechos que pertenecen al mundo real, pero que al mismo tiempo nos traslada a los pequeños mundos ilusorios, al mundo de las imágenes de las hadas, al mundo mitológico con un acontecimiento prodigioso como fue la Creación del Universo y el amor imposible entre el Príncipe Sol y la Princesa Luna.

Luna reconoció en el joven Sol a su amor soñado. Pero ¿por qué no podía acercársele; por qué ni tan siquiera podía tocarle la mano?
Pobre Luna, lloraba desconsolada sin hallar respuestas a sus preguntas. Tantas fueron sus lágrimas que terminaron saltando como chispas por el cielo. Y así fue como nacieron las estrellas.



La segunda parte de la historia nos cuenta que de todos esos prodigios nace una niña RosaLuna, que vive en un mundo real, que crece y estudia, que va a la Universidad y que conoce a un muchacho muy simpático que terminó siendo su novio. Pero Rosaluna posee un aura especial un don especial en sus manos llenas de tierra, dice la autora, que le  permite descubrir las alegorías y los secretos de la Naturaleza. Ello le hace llegar a ser una empresaria de éxito.

Un día, que se despertó muy temprano, casi antes del amanecer, vio unas ramas en el alféizar de la ventana. Se levantó con mucho cuidado y las recogió. Se quedó asombrada: eran justamente las hojas de aquellas plantas que había estado pidiendo y con las que ella sabía que se curaría rápidamente.

Pero su novio empezó a mostrarse muy inquieto. Estaba obsesionado por las historias que la gente contaba acerca de una piedra fabulosa, un talismán que encerraba grandes secretos, y  que estaba relacionado con el misterioso origen de Rosaluna…

Ella le respondía que lo único importante era que se quisieran, que eso debía ser suficiente para él. Pero al parecer, no lo era para su inmensa curiosidad. “Si consiguiera esa piedra decía él…
Al final, solo la Veleta Mágica fue capaz de conducirnos a desvelar todo ese misterio.

Rosaluna y la veleta mágica es una breve narración editada por Ediciones Anroart, ilustrado por Tino Armas con imágenes fotográficas llenas de flores y talismanes repleta de color.

Un cuento más de los muchos cuentos de hadas que esta escritora de nacionalidad inglesa y española, Melu Vallejo escribe y cuenta a  miles de niños en colegios, hospitales, en ferias, incluso en su casa. Una casa que parece una caja de música en donde se conserva el mundo de la ilusión, una casa decorada con escenarios iluminados por destellos de piedras preciosas, de gasas doradas y plateadas, de tiaras y coronas, de pétalos de rosas, de ese mundo de la infancia del que nunca he querido salir. De un mundo que nos permite disfrutar a grandes y a pequeños, hacer realidad nuestros sueños.

Rosaluna y la veleta mágica  es uno de esos cuentos que nos ayudarán a comprendernos mejor la vida, que nos ayudará  a que no se pierda del todo lo vivido o quizás nos puede ayudar a entender la muerte, porque como decía el filósofo si fuésemos inmortales no contaríamos historias.

En definitiva recomiendo este nuevo cuento de Melu Vallejo: Rosaluna y la veleta mágica,  porque en ella vamos a encontrar sonrisas, escondrijos, ese mundo de la ilusión y la magia donde habita nuestra autora. Un mundo que podría protegernos contra casi todos los problemas de la vida.

Fotos Melu Vallejo y Rosario Valcárcel en la Feria del Libro 2013, Las Palmas de G. Canaria.

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lunes, 26 de mayo de 2014

CELEBRACION DO DÍA DAS LETRAS GALEGAS

 El pasado día 16 de mayo se celebró en La Casa de Galicia en Las Palmas de Gran Canaria el día de Las Letras Galegas

Un acto entrañable que estuvo acompañado por la Coral de la Casa de Galicia y la presentación de la última obra del escritor José Espiño Melian  quien leyó el poema "Penélope" y presentó su último libro "Un centenar de lagartos"

José Espiño recorrió la obra y la vida del poeta  Xosé María Díaz Castro creando un clima cálido repleto de esos sonidos gallegos tan cantarinos y al mismo tiempo tan dulces. De palabras amasadas de bosques y senderos, del olor de la tierra gallega.



PENÉLOPE
Un paso adiante  e outro atrás, Galiza,
e a tea dos teus soños non se move.
A espranza nos teus ollos se esprenguiza.
Aran os bois e chove.

Un bruar de navíos moi lonxanos
che estrolla o sono mol coma una uva.
Pro ti envólveste en sabas de mil anos,
e en sonos volves a escoitar a chuva.

Tranguerán os camiños algun día
A xente que levaron. Deus é o mesmo.
Suco vai, suco vén, ¡ Xesús María!,
E toda cousa ha de pagar seu desmo.

Desorballando os prados como sono,
O Tempo vai de Parga a Pastoriza.
Vaise enterrando, suico a suco, o Outono.
¡Un paso adiante e outro atrás, Galiza!
                                   Xosé María Díaz Castro, “Nimbos”

Xosé María Díaz Castro fue traductor y escritor español en lengua gallega. Ingresó en el año 1929 en el Seminario Santa Catalina de Mondoñedo, aunque no se ordenó, y fue profesor en Madrid, donde se trasladó en el año 1948. Debido a sus conocimientos de catorce idiomas trabajó como traductor en el Instituto de Estudios Hispánicos y en el Ministerio del Interior.   

Fue autor de una única obra, el poemario Nimbos (1961), que influyó en los poetas en lengua gallega , por su perfección y por su preocupación por Galicia y los problemas básicos del ser humano, la vida, la muerte y el tiempo. Con estos versos se inicia Penélope, el poema más editado y traducido del poeta a quien este año, La Real Academia Galega tuvo el honor y el acierto de dedicar el DÍA DE LAS LETRAS GALLEGAS.

Es uno de los más profundos poemas de tema social. Forma parte de su única obra publicada, en el año 1961, por editorial Galaxia. Un poemario titulado: Nimbos.
Díaz Castro se encuentra en el Olympo gallego al lado de poetas como Manuel María, Celso Emilio Ferreiro, Avilés  de Taremancos, Aquilino Iglesia, Novoneyra o Rosalía de Castro.

Xosé Díaz Castro fue uno de los candidatos más cantados de los últimos años.

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jueves, 22 de mayo de 2014

MANUEL PADORNO, DOCE AÑOS DESPUÉS


 

Manuel Padorno Navarro.  Nació en Santa Cruz de Tenerife un 30 de septiembre y murió un 22 de mayo del 2002 en  Madrid, un día antes de cuando tenía que ofrecer el recital de sus últimos poemas.



Atlántica pirámide de luz

Delante del Paseo Las Canteras
atlántica montaña, pueden verse
(hermoso Theyde elado) sus laderas
en llamear azul, subir, arderse
hasta volcar, volcánicas esferas
las llamaradas blancas, rehacerse
por arriba del cielo, en las afueras
de la celeste bóveda perderse.
En ti trabajo, fuego, desde el alba,
llama siempre atendida cada día,
edificada claridad al trasluz.
Oh construcción de la mañana, salva
tu permanencia y tu rigor vigía
invisible pirámide de luz.
Efigie canaria, 1994


Padorno fue una figura relevante  en las islas y fuera de ellas. Junto a Elvireta Escobio, Manolo Millares, Martín Chirino y José María Benítez  formó el grupo de artistas y escritores vanguardistas de Las Palmas. Y quizás uno de los mejores poetas en español del siglo XX. Con su esposa Josefina Betancor se instala a principios de los sesenta en Lanzarote, donde escribió 'A la sombra del mar', libro de gran influencia en la poesía española. Posteriormente se traslada a Madrid y desde 1965 dirigió, con Luis Feria, la colección 'Poesía para todos', núcleo aglutinador de poetas y pintores de la Generación del 50.


Padorno fue un poeta canario, atlántico y eso le encuadra en la tradición de la literatura canaria desde Cairasco hasta Morales, pasando por Viana. Además, fue un poeta avanzado, incluido en la generación española de los 50 en cuanto a motivaciones estéticas. Un gran vitalista que se conocía tan bien a sí mismo, a sus derroteros íntimos que supo moverse,  entrar y salir del mundo con ese dominio del lenguaje que lo caracterizo tanto como persona como poeta.

Su pasión era la luz de su tierra, y volvió a vivir con ella cuando regresó en los años noventa a Las Palmas de Gran Canaria. En los noventa, ya instalado en su casa junto al mar de Las Canteras continuó escribiendo intensamente, además de seguir con su habitual actividad cultural, con lecturas, conferencias y varios viajes dentro y fuera de España.

También produjo una extensa obra pictórica en la que se distinguen varias etapas y nueve carpetas de obra gráfica realizadas entre 1970 y 2001
"El motivo principal tanto de mi pintura como de mi poesía, desde siempre, es desvelar el mundo exterior, ir penetrando y fijando una nueva lectura del mundo, lo que yo llamo el "afuera" fundamentado principalmente en el tema de la luz y el mar."

Accesit del Premio Adonais de Poesía en 1962, Premio Canarias de literatura en 1990 y en 1993 Premio Nacional Pablo Iglesias de Letras y Pensamientos. Ganó el primer premio Poesía Ciudad de Las Palmas de Gran Canaria.  Los últimos años de su vida residió en Punta Brava en Las Playa de Las Canteras.
En cada uno de los poemas de Manuel Padorno se manifiesta la personalidad artística del poeta. Poemas en donde define con presición el mar, su playa de Las Canteras. Poemas que cautivan. Pero es en la luz en donde Manuel Padorno condensa toda su poesía.

La nube rosa

Aquel color encima la entretiene
deslizada en el mar, la nube rosa,
palo de batear, cabezas tiene;
en sus extremos vuela despaciosa.

Rosada nube sobre el mar (conviene
no perderla de vista), vaporosa
podría desguazarse, si retiene
su calado La Barra sigilosa.

Encima de la playa como barca
fondea alrededor, su sombra llega
tirada por un hilo de mi mano.

La nube rosa sideral abarca
el espacio, la sombra que me anega:
su figura paseo sombreado,
                                                Efigie canaria, 1994

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martes, 20 de mayo de 2014

La soledad en “Aprendiz de gigoló” con trailer de la película.

https://www.youtube.com/watch?v=KFQKxWnO5-g

 Es una película que nos ofrece las peripecias de dos amigos, Fioravante, (John Turturro) un ser callado, serio, poco atractivo y aparentemente dotado de pocas cualidades amatorias, y el propio Woody Allen, quien interpreta a Murray un personaje peculiar, inteligente y con sentido del humor que se le ocurre la idea de montar un negocio explotando las posibles habilidades amorosas de su amigo.

Inicialmente a  Fioravante no le pareció buena la propuesta pero termina haciendo de tripas corazón y acepta su destino. Así realiza los servicios que su amigo Murray le organiza y acaba siendo aprendiz de gigoló, un trabajo que les proporcionará a ambos dinero en abundancia y la posibilidad de conocer a mujeres fantásticas.
  
Termina ofreciendo sexo, ménage à trois con la Sharon Stone y su amiga Sofia Vergara.  Momentos de éxtasis en los que el amor no está presente, en los que todo es un juego pactado, un enredo de episodios eróticos entre sus clientas. Y la peripecia de una vida efímera que le sumirá en su propia soledad. Relaciones de incomunicación pero al mismo tiempo repleta de instantes que pueden llegar a ser hermosas y fugaces, divertidas y tristes.

Una comedia cuya historia central es la soledad. Esa soledad que nos enfrenta con la realidad, con la vida y en este caso con la pasión.

Pero un día Fioravante conoce a Avigail, un personaje exquisito interpretado por Vanessa Paradis, una viuda judía ortodoxa, una mujer misteriosa que consigue abrir las puertas de la sensualidad.  Aparentemente frágil pero al mismo tiempo tan fuerte que lleva al protagonista a meditar, a pensar, a lanzarse de nuevo en su vacío. Quizás porque Avigail representa la soledad, una soledad autoimpuesta, llena de ternura y de libertad.

Fading Gigolo es una producción estadounidense  con diferentes climas, donde el absurdo predomina. Una película  en donde Woody Allen sigue experimentando con ese  juego del lenguaje  al que nos tiene acostumbrados aunque esta vez escrito por Turturro  y con atractivos resultados.  

Dirigida por John Turturro es un film urbano ambientado en la ciudad de Nueva York, en una comunidad judía de Brooklyn. La banda sonora con canciones de Dalida y de la propia Vanesa Paradis. “Aprediz de gigoló” es una comedia erótica, cuyo trasfondo es la soledad.


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lunes, 19 de mayo de 2014

UNA ESPAÑA, DOS PARTIDOS, José M. Balbuena


Uno no acaba de entender las historias que se montan los políticos españoles en sus campañas electorales, sean europeas, nacionales, regionales o municipales. Aparte de las sandeces que pregonan muchos de ellos, se arman unos rifirrafes de insultos, descalificaciones,  buenas intenciones, promesas, etc. que dejan al ciudadano bastante desorientado y preguntándose si esas personas están en sus cabales y si son dignos de regir los destinos de un país.

En estas elecciones para elegir representantes de España en Europa resulta que se organizan debates públicos y sólo acuden dos partidos políticos, el PSOE y el PP, como si fueran los únicos que existen en España. Es como si quisieran eternizar e institucionalizar el bipartidismo, estilo yanqui , y se olvidaran de la pluralidad política hispánica.

 Uno de los debates que seguí con cierto interés, para ver si descubría algo original y positivo para esta nación, fue el que realizaron la señora Valenciano, del PSOE, y el señor Arias Cañete, del PP. El ex-ministro pepero, ceñido a un discurso, que probablemente le escribieron, ofreció una cara populista, poco imaginativa, prepotente y, a veces, sin control y cierto titubeo, especialmente cuando se salía del guión. Además, como es propio en este partido, recurrió a  la consabida “herencia recibida” del PSOE, pero obviando, claro está, la suicida política de austeridad impuesta por Bruselas, que solo ha beneficiado a los poderosos de este país,y a los políticos que tienen a sus órdenes.

La representante del PSOE le dio un buen repaso a Cañete y venció por goleada, a pesar de los consabidos tópicos que sacó a relucir su contrincante. Pero ella  lo hizo más reposada, más contundente, más puesta en su papel de defensa de las clases trabajadoras y demás desencantados de esta España cupletera, que no cambia ni avanza, para no variar.

Pero esto tiene otras lecturas. Los pesebreros y gente conservadora de toda la vida, dieron la victoria a Arias Cañete, sin reconocer que se había equivocado y de que no tenía razón. Y hablando de Razón, ahí tenemos al omnipresente Maruenda, director del periódico de Ansón, que no debe tener mucho que dirigir porque no falla a ninguna tertulia y debate de los medios “desinformativos” de España. En ellos le vemos con su gesto de contrariedad y nonista cuando habla un oponente, que parece que él y sólo él, es el único que se lo sabe todo. La verdad es que simpático no es.

La otra lectura se refiere a la guinda puesta por el señor Arias Cañete en su declaración posterior, alegando que no quiso machacar a la Valenciano, intelectualmente hablando, para que no lo considerara un machista. Palabras que han causado precisamente, el efecto contrario, poniendo en duda que este personaje pueda defender a España y al feminismo  en el Parlamento europeo. Por cierto, no se está hablando mucho en los debates de esta embrollada Europa, que no nos da sino disgustos y recortes. Se prevé que en las elecciones del 25 la abstención será bastante notable y que el resultado será equilibrado para los dos principales partidos. Sólo sus fans enfervorecidos y admiradoras masoquistas pueden defender la actitud de este ministro venido a menos que quizás sepa bastante de economía y de agricultura, pero de sicología,  muy poco. El ex-ministro, lo único que ha hecho con su barrabasada, es favorecer a la señora Valenciano y al PSOE. Creo que el PP no está ya para cometer más equivocaciones de las cometidas, que no tienen nada que ver con la “herencia recibida”, sino que es ya herencia propia. Han creado un clima de inestabilidad laboral pavoroso  y han favorecido a un banca voraz, con nuestro propio dinero y eso la gente, el pueblo, no lo olvida. Salvo los que solo tienen lagunas en su memoria, que también los hay...


Aparte de lo dicho, los españoles se percatan de que antes de estas elecciones ha habido disidentes, o traidores, como les llaman algunos, que han abandonado sus partidos para crear otros nuevos. La racha la inició años atrás Rosa Díez, que abandonó el PSOE siguiéndole otros socialistas. Después vinieron Vidal Quadras y otros más que se han montado sus chiringuitos taifianos en diversas partes de España, para predicar su verdad y su mesianismo salvador. 

domingo, 18 de mayo de 2014

LA FIESTA DEL RECUERDO.

Cuando sea mayor 
quiero vender caracolas
como mi tatarabuelo
para que la gente sola
y triste pueda escuchar
las palabras de las olas-
imaginó el niño chico.
Pegó el oído a la concha.

-El día menos pensado,
un día de estos cualquiera,
quisiera correr al mar,
zambullirme sin más vueltas,
en el fondo abrir los ojos
y ver como la luz entra-
elucubraba  el anciano.
Y miró al tataranieto.

Aquiles García es un hombre de inquietudes humanísticas. Un escritor nacido en Las Palmas de Gran Canaria que  sondea en estos versos esas sombras que dictan el transcurrir del tiempo, quizás porque a él siempre le ha gustado  apostar por una poesía cercana y entendible, por una poesía llena de encanto y sinceridad sobre todas esas cosas que marcaron su infancia: la religión,  la familia, los juegos. El paisaje de su isla.

BALANDRISTA
Balandrista en el Puerto de La Luz
Soleando los días invernales
El mar con su representación cómica
De cielo
Flota como si tal fuera posible
Y lo abisal estuviese debajo
Navega como si aire alguno
No propulsara en una dirección
Precisa
Los vientos del pueblo que nos aventan
El viento de los miedos que se arrastran
Rod Stewart al micrófono cantando
I am sailing
El que esnifa en su hiperactividad
Balandrista que derrotas seguro
En el margen cierto de la bahía
Sin perder de vista el portuario espíritu.   Poemas de Aquiles García, “Otro uno desconsuelo”

Porque a  Aquiles García le gusta escribir versos de la evocación, describir ese ayer de siempre. Le gusta rebuscar en el baúl de los recuerdos para sacar a flote fragmentos de vida, sonidos música. Esa fiesta  del recuerdo que poco a poco los años nos van devorando.

Presidente de la Asociación Canaria para la edición, La NACE, comparte vivencias e inquietudes culturales con otros creadores como en este libro en donde participa también otro poeta, Adolfo García García.
Quiero resaltar también la preciosa portada de “Otro uno, desconsuelo” realizada por la pintora  Arima Raquel García Santana.

“Otro uno, desconsuelo”, es uno de los poemarios que recomiendo y que pueden encontrar en librerías, así como en La Feria del Libro de Gran Canaria.

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jueves, 15 de mayo de 2014

Pérez Galdós, entre el éxito literario y la pobreza, Teo Mesa

 Celebramos gozosos en estos días, otro aniversario del nacimiento del ilustre literato de talla universal, don Benito Pérez Galdós. Se cumplen 171 años, de su natalidad en la casa paternal de la calle Cano, 6, del barrio trianero de Las Palmas de Gran Canaria, el 10 de mayo de 1843. Hoy, en ese mismo lugar, disfrutamos de la Casa Museo que lleva su literario nombre y la historia del prócer. Con los máximos respeto hay que inclinarse ante la majestad de este portentoso genio de brillante y especial talento para la creación literaria, hecho a sí mismo (los genios no necesitan de Academias para formarse), y haber sido un denodado trabajador durante toda su existencia.
Reflejo de ello son en sus cientos de obras escritas: novelas, teatros, cuentos e infinidad de artículos de prensa (periódicos en los que colaboró en prematuros comienzos, a los diecisiete años, en el rotativo El Ómnibus, de Las Palmas de Gran Canaria, con sus sarcásticos artículos que tituló Mi criado Bartolo y Yo,  en noviembre de 1862. En los cuales se deshoja una imaginación y redacción, anómalas para su juventud, que apuntaban muy alto, como así sería.
Pero, su bondad y honradez de pensamiento, se correspondió en persona de gran humanidad y entrega incondicional a sus principios éticos, los cuales fueron inalterables durante toda su vida. Era un brioso defensor de los oprimidos en educación, justicia social, y en denunciar, mediante sus páginas literarias, unas mejores condiciones de vida para la relegada población de entonces. Por estas delaciones noveladas y teatrales, contra los fanáticos rigores de una parte del catolicismo ultramontano y la vejada sociedad popular, estuvo proscrito de los parabienes de haber sido aceptado como intelectual por la jerarquía clerical y por la oligarquía conservadora.
            La vida de Galdós estuvo marcada por su declarada pasión a la creación literaria. Así fue expresada en todas sus obras. Ánimo que le generó savia de pureza y entusiasmo vital. Esta afortunada dedicación, a la que mantuvo devoto durante toda su afortunada existencia, estuvo ungida por el zénit literario que en vida alcanzó y disfrutó complaciente en sus adentros. Nimbado por las verdes hojas del árbol de los laureles, éstos no le afectaron en su modo de pensar, ser y sentir, en su inmutable personalidad. La humanidad y bonhomía del intelectual canario, que llevó inmanente, no fueron mutadas por las vanidades transitorias del éxito intelectual de los varios momentos de éxitos.
Nadie discute, al Maestro de maestros, de la pluma creativa de la que gozó. Sus obras literarias fueron concebidas en el entorno hispano, en temas y costumbres naturalistas. Tuvo Galdós, un excelso triunfo literario en el magisterio de la narración ideada, y realista, también, como muy pocos escritores, por lo que fue el gran novelista del siglo XIX, de la lengua castellana. Y en parangón, con los mejores novelistas de occidente. Entre las muchas obras para elegir, figuran como más sobresalientes los Episodios Nacionales, al margen de las brillantes novelas: Marianela, Gloria, El Abuelo, Doña Perfecta, Misericordia, Miau, Fortunata y Jacinta, Tristana, etc.; en obras teatrales: La de San Quintín, Electra, Alma y Vida, Sor Simona, Antón Caballero, etc., Éxitos de ventas en los límites de la geografía nacional, que sólo fueron para el magno escritor, pequeñas cosechas económicas del momento.
Con el producto de estos trabajos, en plena suma de ventas de las ediciones, por sus éxitos literarios, solo pudo construir una modesta morada, junto a la playa de La Magdalena, en la capital de Santander, a la que llamó San Quintín (por haber escrito en ella esta obra teatral aludida). No se conocen otras pertenencias de Galdós, amén de su biblioteca y enseres domésticos. Casa aquélla, que en parte, y algunos muebles, fueron diseñados por otra de sus grandes pasiones, como lo fuera la plástica pictórica. En ésta demostró un nato talento para su práctica, que ejercitó hasta que sus ojos ciegos y manos temblorosas, por la enfermedad y la vejez, no se lo permitieron más.
Pero, por el contrario, el aplastante analfabetismo, cuasi general en la mayoría de la población de aquella época, hacía que apenas se compraran obras escritas. También a ello, le fue perjudicial un tiempo de nula difusión internacional de las obras, que solo se difundían en territorio español. Las obras de Galdós, de haber sido escritas en Francia, UU EE o Inglaterra, le hubiera permitido vivir como un acaudalado por su extensa tirada bibliográfica.
En España le fue imposible vivir de los réditos de las ventas de sus novelas, como a tantos otros intelectuales. Hecho por el cual, tuvo que trabajar en plena vejez, ciego, enfermo, pobre y en la decrepitud, ante la natural evolución biológica que sufre el cuerpo. “Amenguada considerablemente mi vista, he perdido en absoluto el don de la literatura. Con profunda tristeza puedo asegurar que la letra de molde ha huido de mí, como un mundo que se desvanece en las tinieblas”, escribía, en 1915, en uno de sus discursos. Ciego y enfermo, tuvo necesidad de seguir escribiendo para subsistir. Sus últimas obras fueron dictadas a su secretario.
La abominable pobreza, le visitó en sus últimos años de su existencia, a este gigante indiscutible y potentado de la literatura. Ante esta afrentosa vejez, de quien ha conducido a España por el camino de la enseñanza histórica de un pueblo y coronado como padre de la novela moderna y contemporánea, en la actualidad. “En España hay una novela ‘El Quijote’; y un novelista, Galdós”, afirmaba Menéndez y Pelayo. Y en cuanto al número de personajes inmortales, hijos putativos de su pluma, Galdós fue el segundo en dicha creación en España, después del escritor del Siglo de Oro, Lope de Vega. 
España toda, se desvela para honrar una augusta y digna vejez de nuestro gran literato. Los medios escritos se movilizan con el ánimo de crear una subvención económica para que el resto de sus días, al escritor abatido por la larga existencia y aquejado de dolencias, no le sean de vergonzante pobreza. Los diarios de la Villa y Corte, El Liberal y ABC, y desde todos los lares hispanos, claman y redactan artículos solicitando del Gobierno, que conceda una pensión vitalicia al ilustre escritor y dramaturgo.
También, en la ciudad laspalmeña, se hace eco del acongojado llamamiento. Presionado por los medios escritos locales y la intelectualidad de la isla, el remolón consistorio capitalino de su ciudad natal, concede 10.000 pta. Que nunca, ni jamás, pagó al hijo más universal de Canarias, en su desdichada necesidad. ¡Qué ignominia! Quien tanta gloria dio, con su digno nombre, a la ciudad de nacimiento. La promesa económica la cumplió el Ayuntamiento, para sumarla a la ayuda económica del gran monumento inaugurado en Las Palmas, a su hijo más lustrado intelectualmente, donando 25.000 pta, en 1930. Ya no le hacía falta: Galdós falleció el 4 de enero de 1920.    

sábado, 10 de mayo de 2014

EL PERFUME, V. Aleixandre

Chupar tu vida sobre los labios,
no es quererte en la muerte.
Chupar tu vida, amante,
para que lenta mueras
de mí, de mí que mato,
para agotar tu vida
como una rosa exhausta.
Color, olor: mis venas
saben a ti: allí te abres.
Ebriamente encendido,
tú me recorres. Toda,
toda mi sangre es sólo
perfume. Tú me habitas,
aroma arrebatado
que por mí te despliegas,
que como sangre corres
por mí: ¡que a mí me pueblas!,  V. Aleixandre



Vicente Aleixandre está considerado como uno de los grandes poetas españoles del siglo XX. Perteneciente a la Generación del 27, recibió el Premio Nobel de Literatura en 1977

El poder de las fragancias en una relación amorosa:

Se dice que el 90% de la realidad diaria está estrechamente unida al olfato. Por lo que podría decirse que pueden llegar a ser refugio de los estímulos, de las musas.

Las fragancias y el sexo están más ligadas de lo que todo el mundo cree, según muchos estudios los aromas viajan rápidamente al cerebro, vestidas con guiños sensuales, y nos llevan a recuerdos, a situaciones semejante a un oloroso viento, que pueden ser encaminadas al ámbito sexual. Y se consideran tan importantes que el terapeuta sexual, Ian Kerner, nos dice que en muchas peleas los olores pueden ser las armas de paz.

Los aromas son esos espacios donde se revive todo, el velo que lo contiene, que nos envuelve. Las alas que atraviesan las tormentas y desvanecen los miedos.

En estudios y encuestas realizados recientemente, más del 80% de los hombres afirmó que los aromas de una mujer palpitan, realzan su belleza, y 60% señaló que, al menos una vez en el pasado, la fragancia de una mujer puede ser la razón más importante para recordar el roce de las caricias. El deseo de reencontrarse de nuevo.

Muchas personas se excitan fácilmente a través del olfato, sin embargo, la importancia que se le brinda usualmente es bastante escasa. Ahora bien, no podemos olvidar que en la antigüedad, a la moral y a la religión le daban una gran importancia al perfume.

Desgraciados los jóvenes que, engañados por el perfume lascivo y seductor de tales rosas, pasan sus más bellos años clamando ¡amor, amor! El amor, es decir ese vicio que se trocará presto en veneno que los castigará terriblemente”  ,  L.J. Chiavarino.

También se llegó a decir que “El perfume es un aceite adulterado, es Judas el traidor, con el fueron ungidos los pies del Señor, al abandonar este mundo, puesto que los cadáveres son perfumados

El origen de los Perfumes nació en relación a la religión, para purificar el alma y en ofrenda a los dioses. En Grecia, atribuían a los perfumes, ungüentos, aceites… un carácter divino, la fuente de la belleza, la estética y la armonía. Los perfumes también se vieron muy relacionados con la medicina. Hipócrates, que según la mitología fue descendiente de Asclepio (representado con serpientes enrolladas en un bastón), padre de la medicina y la curación, casi los santificó Aplicó concentrados y ungüentos a sus pacientes. 

Los fenicios y los egipcios guardaban el perfume, igual que dulces latidos, en pequeñas y antiguas vasijas talladas en piedra de alabastro o bien en recipientes de oro, arcilla, cristal, vidrio, con forma fálica cilíndrica y con base redonda con dos asitas por donde pasaban un hilo para colgar al cuello.

 Los tarros eran utilizados también por las sacerdotisas de culto a Diosas en ceremonias sagradas orgiásticas a modo de falos para la masturbación (de manera similar a las usadas en las desenfrenadas fiestas “Embateusis” en honor a la diosa Cibeles) De ahí proviene el hecho de que en el habla de los griegos la palabra alabastro pasó a significar insaciable, característica de la Diosa del Amor y sus sacerdotisas de costumbres disipadas. 

El Jardín perfumado, extracto:

…Alguien ha dicho: Si deseas copular, coloca a la mujer sobre el suelo, abrázala estrechamente y pon tus labios sobre los suyos. Luego apriétala, chúpala, muérdela; besa su cuello, sus senos, su vientre y sus flancos; estrújala contra ti hasta que el deseo la debilite y, al verla en este estado, introduce tu miembro. Si obras de este modo, vuestro goce será simultáneo, y ése es el secreto del placer. Pero si olvidas este plan, la mujer no satisfará su deseo ni obtendrá goce alguno

Si deseas repetir el acto, perfúmate con dulces aromas y luego acércate a la mujer y alcanzarás un resultado feliz.

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